INVESTIGACIÓN MINDFULNESS 2MV
El Instituto de Psicología Integral Baraka estuvo presente por medio de David Alvear en el I CONGRESO INTERNACIONAL DE PSICOLOGÍA Y PSICOTERAPIAS HUMANISTAS que se celebró en BARCELONA, los pasados 19, 20 y 21 DE NOVIEMBRE 2015.

Baraka presentó los resultados de su última investigación. Se recogieron datos de 40 personas que realizaron un protocolo de 9 semanas de “Mindfulness para la Segunda Mitad de la Vida”.

Mindfulness es una intervención psicoeducativa por medio de la cual las personas aprenden a discriminar cuando están en “piloto automático” y cuando están prestando “atención plena” a lo que está sucediendo. Gracias al entrenamiento se aprende a vivir en el “aquí y ahora” con una actitud amable y compasiva hacia uno mismo y hacia los demás. El cultivo de la Atención Plena o Mindfulness se caracteriza por el ejercicio de dos habilidades psicológicas importantes: vivir en el momento presente y estar abierto a las circunstancias cambiantes tanto internas como externas.

La segunda mitad de la vida es una etapa en la que se producen cambios importantes tanto a nivel físico como a nivel psicológico. Prepararnos para esos cambios puede prevenir gran parte de los problemas de salud asociados al envejecimiento y puede promover una vida psicológica equilibrada, integrada y plena de sabiduría. La pionera teoría del ciclo vital de Erikson (-texto cortado-)presenta cada etapa de la vida con una tarea a desarrollar. La tarea puede desarrollarse con éxito o fracaso. El resultado afecta al desarrollo y bienestar del individuo. En la segunda mitad de la vida la tarea a realizar es la Integración, es decir, el sentimiento de haber completado un ciclo que ha tenido un sentido. Esto se logra al aceptar  que la vida biológica tiene un final y que las generaciones se suceden. El fracaso en esta tarea conduce a la tristeza y la desesperanza, o al sentimiento de frustración por no haber completado el proyecto vital. Como consecuencia se produce una pérdida del sentido de la vida. Baraka orientó el entrenamiento a trabajar con los dos problemas que la literatura científica señala como los que más hacen sufrir a la población de más de 55 años: Preocupación y afrontamiento del dolor.

Limitando la “rumia mental” o preocupación se libera mucha capacidad cognitiva que puede emplearse en la resolución de los problemas prácticos de la vida cotidiana o en actividades intelectuales creativas.

Aprendiendo a afrontar el dolor y el miedo al dolor, se libera mucha capacidad emocional que puede emplearse en cuidar amistades, ayudar a otras personas y dar un sentido a la vida.

Para realizar la investigación se administraron dos cuestionarios científicamente validados.Uno que mide diversas facetas de la práctica de la Atención Plena y otro de Salud y Calidad de Vida.  Los resultados han sido muy alentadores. De las cinco facetas que mide el primero los participantes obtuvieron mejorías significativas en 4: Capacidad de observación, toma de conciencia, no Juicio y no reactividad. Del cuestionario de salud (texto quitado) se obtuvieron mejoras estadísticamente significativas en 6 variables de 8: Funcionamiento físico, limitaciones relativas a problemas emocionales, energía/fatiga, bienestar emocional, funcionamiento social y salud general.

Los resultados nos animan a pensar que Mindfulness es una estrategia (texto quitado)  que puede ser de gran utilidad para enfocar la fase adulta con garantías de aceptar las pérdidas ocasionadas por el envejecimiento físico y el egocentrismo psicológico, y es una práctica que conduce, paulatinamente, a la armonía fisiológica y a la paz mental. Mediante la práctica de Mindfulness, el adulto puede recuperar la dignidad de una fase de la vida que ha sido injustamente tratada por nuestra cultura y encontrar una función social de la que ha sido desprovisto por esa misma civilización. Aprendiendo a vivir en el momento presente, enraizado en las sensaciones físicas desprovistas de prejuicios y en los sentimientos sanos universales como el amor y la compasión, la vejez puede resultar una época de la vida de gran armonía y profunda sabiduría.

Baraka sigue desarrollando este protocolo de trabajo que es el primero en implementarse en España y en ser testado científicamente. Los participantes nos aseguran que el entrenamiento les resulta de gran valor para comprender cómo funciona el cuerpo/mente y para afrontar el futuro sin miedo y con ganas de seguir evolucionando. En este momento hay 40 personas siguiendo el entrenamiento y ya están cubriéndose las plazas para el trimestre que viene. Si estás interesada ponte en contacto con nosotros.

Fernando Rodríguez Bornaetxea
Columna publicada en el Noticias de Gipuzkoa 19/12/2015.