INICIACIÓN AL MINDFULNESS PARA ADOLESCENTES, FOMENTANDO LA CONCIENCIA CORPORAL
La adolescencia es, probablemente, la etapa más turbulenta en la vida de una persona. Es un período en el que se cimentan nuestros valores, nuestra imagen interior, nuestros deseos y aspiraciones y se experimentan límites de todo tipo, siempre bajo la atenta mirada de los otros. La manera en la que los demás aceptan o rechazan nuestras decisiones también toma especial relevancia.
La práctica del Mindfulness ayuda a mantener una conciencia atenta ante el presente, sobre nuestros pensamientos, emociones, sensaciones corporales y sobre el medio que nos rodea con apertura y curiosidad, lo que mejora la disposición a aprender y nuestras relaciones personales. Las dinámicas de grupo en la expresión corporal potencian la creatividad y estimulan el pensamiento crítico, actualizan constantemente nuestra percepción y nos enfrentan a la escucha y al trabajo en equipo, de manera que nos hacen estar presentes y ser responsables de nuestros actos.
Existe cada vez más evidencia científica de que el Mindfulness y una mayor conciencia corporal ejercen efectos positivos sobre factores de riesgo y síntomas de enfermedades físicas y mentales. Parece lógico que lo deseable es empezar a disfrutar de estos efectos positivos en edades tempranas, proporcionando así una luz en nuestro camino.